El timo del empleo industrial

El cierre de Altadis, la antigua tabacalera es inminente. El anuncio de la multinacional de reducir el empleo en la factoría de Cádiz en más de un 60 % es una mala noticia para la ciudad.
La industria en la Bahía lleva agonizando una década y pidiendo dinero público no para ser más competitivo sino para mantener empleos ficticios que sabía que iba a destruir más temprano que tarde. Por eso la historia de Altadis es una traición anunciada.
Las crisis industriales tienen caminos muy cortos. Son como los viejos con achaques, que tienen sus días contados, porque si la voluntad de sanar no existe (como dijera Séneca) es muy difícil la curación.
Ninguna multinacional industrial puede tener localizaciones tan conflictivas, tan caras (salarialmente hablando) y lejanas como la Bahía de Cádiz. La Globalización lo sacrifica todo y el mercado no tiene criterios sociales, por eso nuestra clase política no debe caer en la ingenuidad de que un solo puesto de trabajo industrial se mantiene con euros públicos.
Es una hipocresía política plantear el desarrollo industrial en la Bahía de Cádiz como único motor de nuestro empleo. Otras industrias como la turística, del ocio, la industria cultural, los recursos naturales son el modelo de desarrollo económico en que se deben buscar referencias de futuro de la mano de la Innovación, la Universidad y las pymes.
Una sociedad más emprendedora y con conciencia crítica nos hará menos dependientes, más libres y sobre todo con más empleo.
José Berasaluce Linares