Cada ciudad busca una excusa para despuntar entre el resto, como cada cual, cada ciudad busca una singularidad y ensambla un evento del que luego heredará un nuevo concepto de sí misma.
Me encuentro pasando unos días con mi familia en Zaragoza, por aquello de la expo, y aunque las comparaciones son odiosas es inevitable recordar aquella expo del 92.
Esta es tres veces más pequeña y dura justo un tercio de lo que aquella, todo es más pequeño y los pabellones están instalados en “bloques” donde forman comunidades de vecinos más o menos bien avenidas: Parece como si en el mundo se hubiera instalado un torbellino y hubiese colocado, por ejemplo a Kazajistán pared con pared con Nigeria
Hay ausencias importantes como EEUU, Canadá o Reino Unido y se nota la falta de interés, o de recursos de algunos países cuyo pabellón se limita a dos pantallas, tres videos y poco más. Otros países han reducido su pabellón a un mercado de productos más o menos típicos. Impresionante sin embargo la Torre del Agua y el Pabellón Puente. En fin que los “mañicos” han hecho buenos a los “miarma”. De todas formas merece la pena ir, pero con parasol, ropa ligerita y en chanclas, porque de sombra poca y de microclima menos.
Por otra parte en cuanto a las infraestructuras, que es lo que luego queda y de lo que verdaderamente se beneficia la ciudad, algunas aún inacabadas. Es como si hubiésemos llegado antes de tiempo.
Es inevitable también pensar en Cádiz en el horizonte del 2012, ¿llegaremos a tiempo?, o tendremos que ir sorteando las obras?
En fin, quiero compartir con vosotros estas impresiones, desde Zaragozá que diría un maño.
Toñi Asencio
Me encuentro pasando unos días con mi familia en Zaragoza, por aquello de la expo, y aunque las comparaciones son odiosas es inevitable recordar aquella expo del 92.
Esta es tres veces más pequeña y dura justo un tercio de lo que aquella, todo es más pequeño y los pabellones están instalados en “bloques” donde forman comunidades de vecinos más o menos bien avenidas: Parece como si en el mundo se hubiera instalado un torbellino y hubiese colocado, por ejemplo a Kazajistán pared con pared con Nigeria
Hay ausencias importantes como EEUU, Canadá o Reino Unido y se nota la falta de interés, o de recursos de algunos países cuyo pabellón se limita a dos pantallas, tres videos y poco más. Otros países han reducido su pabellón a un mercado de productos más o menos típicos. Impresionante sin embargo la Torre del Agua y el Pabellón Puente. En fin que los “mañicos” han hecho buenos a los “miarma”. De todas formas merece la pena ir, pero con parasol, ropa ligerita y en chanclas, porque de sombra poca y de microclima menos.
Por otra parte en cuanto a las infraestructuras, que es lo que luego queda y de lo que verdaderamente se beneficia la ciudad, algunas aún inacabadas. Es como si hubiésemos llegado antes de tiempo.
Es inevitable también pensar en Cádiz en el horizonte del 2012, ¿llegaremos a tiempo?, o tendremos que ir sorteando las obras?
En fin, quiero compartir con vosotros estas impresiones, desde Zaragozá que diría un maño.
Toñi Asencio
No hay comentarios:
Publicar un comentario